Unas 1.500 personas piden consejo sobre vacunas para viajar al extranjero

Los onubenses que se embarcan en un viaje fuera del país cada vez toman más precauciones y se preocupan más de los posibles efectos adversos que para su salud pueda tener una estancia en un país en vías de desarrollo. Unas 1.500 personas acudieron el pasado año a Sanidad Exterior. A éstas se les facilitó consejos, recomendaciones sanitarias y la administración de cinco vacunas que están fuera del calendario de vacunaciones de los centros de salud.

El centro de salud del Torrejón, Jesús Pardo, insistió en que se percibe el interés de contar con una mejor preparación sanitaria a la hora de irse a otras latitudes bien por turismo, bien por otros motivos. Esa preocupación "no debe limitarse a los países que consideremos que tienen una condiciones sanitarias malas; hay que consultar también si tenemos idea de ir a determinadas zonas de países desarrollados".

Para todo ello, los centros de salud -es decir, la Atención Primaria- trabaja en colaboración con Sanidad Exterior (SE), que pertenece al Ministerio de Sanidad.

Pardo aconseja que, sea cual sea el destino, no está de más que el viajero vaya provisto de un botiquín así como un informe médico si padece algún tipo de enfermedad por si precisara de asistencia.

El director del centro del Torrejón informó de que algunas vacunas se ponen en las mismas instalaciones de Sanidad Exterior mientras que otras pueden ser facilitadas por los centros de salud. No es el caso, por ejemplo, de la de la fiebre amarilla, que es distribuida exclusivamente por SE. Las del paludismo y las fiebres tifoideas las proporciona el SAS.

Tanto en los centros de salud como en SE se avisa de que hay algunos episodios que con bastante frecuencia afectan a los viajeros que se adentran en países donde las condiciones higiénico-sanitarias no tienen los mismos niveles que aquí. Se trata de la conocida como diarrea del viajero o los episodios febriles.

Jesús Pardo añadió que es más que conveniente que la persona que se dispone a hacer un viaje a uno de los países en los que se pueda pedir algún tipo de medida preventiva "hay que avisarle con dos meses de anticipación como mínimo" ya que hay vacunas que requieren un tiempo para que generen anticuerpos.

Si el viaje se queda en el entorno más próximo, como puede ser la Unión Europea, es importante obtener la tarjeta sanitaria europea que tiene una vigencia de dos años.

Lo expuesto desde el centro de salud del Torrejón encaja plenamente con lo que se indica desde SE de Huelva. Este servicio detectó en el primer semestre del año un ascenso de atendidos (576 en total) que lo hacen por turismo llegando este motivo a justificar el 50% de las asistencias realizadas. Hace un par de años, la mayor parte de los vacunados viajaron por trabajo y tan solo un 10% lo hicieron por ocio.

En una entrevista para Europa Press, la jefa de servicio y médico de Sanidad Exterior, Mar Faraco, lanzó un mensaje de recomendación para obtener información sobre las vacunas necesarias o recibir una educación sanitaria en el caso de que se vaya a realizar un viaje a países en vías de desarrollo.

Otro colectivo de receptores de estas vacunas está conformado por grupos de inmigrantes que vienen a Huelva a trabajar en las campañas agrícolas. Estas personas, que antes permanecían en la provincia y que proceden de algunos países concretos, regresan a su país "porque es más barato vivir" hasta que inicien una nueva campaña.